Cuento: En la Pared...(última parte)

El día terminaba, Jesús Fernández bajaba de su hermoso caballo y era recibido por el tenedor de libros, le trató un par de asuntos, asentó con la cabeza y se retiró, se dirigió al cuarto de Dolores, estuvieron susurrando un par de minutos y salió para dirigírse a su cuarto. Al amanecer la pared del cuarto de Jesús Fernández y su esposa Guadalupe Ramírez de Fernández, ya estaba sellada…así permanecería durante muchos años más.



Habían pasado varios meses desde su visita a don Isaac y Domingo no encontraba alternativas, más tarde anduvo pastoreando un rebaño de cabras, su salud que desmejoraba cada vez más, no le permitía hacer sus labores como antes. El sol era radiante y lo tenía empapado en sudor, se quitó el sombrero, se enjugó el sudor con la manga de su camisa, volteó y vió a lo lejos una estela de polvo, una camioneta lujosa venía por el camino de terracería, era don Isaac.

Cuando llegó al casco de la hacienda, la camioneta estaba estacionada cerca del portón, ingresó y de la fachada de la hacienda venía su patrón con un desconocido, los saludó mientras se dirigía a su casa, don Isaac hizo señas para que se acercara, don Domingo se dirigió a ellos, -Domingo, necesito que venga conmigo, aquí mi amigo el arquitecto Jiménez está analizando a detalle la posibilidad de restaurar la hacienda, queremos hacerla un hotel de lujo.-, -si señor-, respondía Domingo mientras caminaban hacia el interior de la casa principal.

Los años habían sido crueles con la grandeza de San Francisco de Paula, los paredones aún erectos presentaban grandes desprendimientos, las antiguas ventanas de madera apolilladas y los techos yacían en su mayoría en el suelo con las vigas podridas llenas de alimañas, el aire fresco con olor a pirul hacía rechinar al antiguo portón de madera, la soledad de la hacienda era notable, gran lugar en gloriosos años, ahora solo quedaban escombros y anonimato. ¿Cuántas vivencias habrán pasado aquí don Isaac?, alegrías, tristezas, tragedias, labores, vidas cotidianas, y ahora vea en lo que terminó-, decía el arquitecto, Isaac no respondió nada, simuló una sonrisa burlona y meneo la cabeza, Domingo agachado a su paso se dirigía entre nopales, hierba y escombro.



-Mire Domingo-, decía Isaac mientras ingresaban al antiguo cuarto derruído de Jesús Fernández, -este detalle le saltó la atención al arquitecto, en esta pared a esta altura, vea, una especie de arco, usted que es de aquí, dígame que utilidad pudo haber tenido ese detalle, parece ser un arco dentro de la pared-, Domingo miró fijamente, después dijo: -es curioso, estos arcos se construían para las ventanas, las entradas-, -ya lo sabemos Domingo-, respondía Isaac de manera grotesca, -queremos saber si estos arcos tenían alguna utilidad dentro de las paredes, es decir, si servían como soportes de peso o algo parecido, los arcos los hay en todos lados, pero este esta oculto debajo del yeso de la pared, ¿que función tenía?, Domingo simplemente meneo la cabeza,- no lo sé señor, nunca me había dado cuenta, y no sé que utilidad tenga, si me disculpa me retiro, voy allá abajo con mi familia a…-, -ándele, retírese Domingo-, ordenó Isaac.

El olor a comida salía de la pequeña vivienda de Domingo, dentro, el desórden abundaba, los niños corrían, iban y venían, Soledad calentaba los alimentos, domingo pensativo sentado en la mesa mostraba preocupación. Al terminar la comida, Soledad le preguntó sobre su estado de ánimo, este solo meneo la cabeza, apenas había pellizcado la comida, se puso su sombrero y salió.

-¡Papá, papá!, gritaba un niño sucio y apresurado, Domingo se encontraba lejos del casco en sus ocupaciones, -el patrón ya se fue, ven a ver lo que hicieron en la pared-, Domingo tranquilamente dejó sus herramientas y se dirigió con calma al casco. Ya sabía lo que había ocurrido, sin embargo no le preocupaba mucho. –Mira, esto lo acaban de hacer, dice mi mamá que hace una hora mandaron pedir una barreta y después salieron muy contentos con algunas cosas pesadas en sus brazos, lo taparon con sus chamarras-, decía el niño, Domingo no le prestaba mucha atención, miraba fíjamente al fondo del gran boquete, había una entrada la cual bajaba con una antigua escalera apolillada, bajó con cuidado, la poca luz entrante le hizo ver que era un sótano, había algunas armas y papeles, en una esquina un esqueleto de mujer, la cabellera negra y larga le mostraba su condición. En el suelo, huellas recientes y un par de marcas rectangulares que demostraban que habían levantado algunos objetos que estuvieron ahí desde hacía muchos años. –Vámonos de aquí muchacho, y diles a tus hermanos que no entren nunca, es órden mía-. El niño asentó con la cabeza.

Pasaron varios meses, después de haber mandado sellar aquél boquete en la pared y hacer una misa al esqueleto del sótano, Domingo seguía en su vida cotidiana, el gusto de vivir en aquel hermoso lugar en compañía de su familia no tenía precio para él, su edad avanzaba cada día más.

Cierta tarde de invierno, después de algunos años del descubrimiento del sótano en el cuarto de Jesús Fernández, el crepúsculo irradiaba colores sobrios, el frio del atardecer entumía las mejillas de Domingo que como cada atardecer, sacaba a su rebaño de cabras a pastorear en las afueras del casco. Ahora la posesión de la hacienda había cambiado, la muerte súbita del señor Isaac en un accidente autmovilístico por más extraño en el año del descubrimiento, había heredado el casco a una de sus hijas, persona que nunca tendría presencia en la finca por su falta de interés en ella. Los años pasarían, Domingo nunca volvería a escuchar a Dolores, él se quitaría esa preocupación para siempre.

FIN







Saludos!

GeoTec Prospectiva.

Hola Get Tec
Exelente relato y de las fotos no se diga, un exelente lugar para la prospecion, al parecer a esta engrosando su libro de historias

de verdad felidades
Saludos carabino

wow al millon!!



ay tamozzz.

Hola GTP-QRO que buenas historia estubieron muy buena y entretenidas.

Saludos.

muy buena historia gtp-qro, es la leña que nos mantiene vivos y esperando tener la suerte de que nos pase a nosotros, suerte.

Saludos a todos y gracias.

GeoTec Prospectiva.

Saludos Geotec, sencillamente sensacional, que hermosa manera de
pintar tu redaccion, se vive, se ve, se siente, se goza...saludos cordiales.... un gran abrazo... Pako

FELICIDADES (ANTROPOLOGO)TIENE USTED MUCHO TALENTO MIS RESPETOS QUIERO QUE SEPA QUE ME ENTRETIENE SANAMENTE USTED CON SUS BELLAS HISTORIAS,,,SALUDOS ps/ TIENE ALGUNA FECHA PARA CUANDO REDACTARA/O SALDRA EL LIBRO AL PUBLICO???.

Muy buena historia, lo interesante es que es real y no un "cuento" como lo dice el título, amenos que le llame cuento por ponerle un poco de ficción para aderezar el relato, ¿O también lo del esqueleto es real? ¿Hubo tal crimen?

saludos

Que tal compañero excelente historia que compartes.

Saludos

Hector Hugo Zavala escribió:FELICIDADES (ARQUEOLOGO)TIENE USTED MUCHO TALENTO MIS RESPETOS QUIERO QUE SEPA QUE ME ENTRETIENE SANAMENTE USTED CON SUS BELLAS HISTORIAS,,,SALUDOS ps/ TIENE ALGUNA FECHA PARA CUANDO REDACTARA/O SALDRA EL LIBRO AL PUBLICO???.

Hola Héctor.

No hay fecha aún, todavía me falta por compartir más de 35 cuentos y 40 artículos sobre temas afines a la búsqueda de tesoros. Pero es buena idea, mientras puedo ir viendo el asunto de un editor. Por cierto, me formo como antropólogo, no arqueólogo, no es lo mismo...

Gracias y un saludo.

GeoTec Pospectiva.

DEThector escribió:Muy buena historia, lo interesante es que es real y no un "cuento" como lo dice el título, amenos que le llame cuento por ponerle un poco de ficción para aderezar el relato, ¿O también lo del esqueleto es real? ¿Hubo tal crimen?

saludos

Gracias por preguntar.

La historia es real, solamente que en vez de encontrar el sótano o la entrada a este en la pared del cuarto del patrón, este "don Isaac" (cuyo nombre es otro pero sí de orígen judío) localizó el tesoro fabuloso de la última imágen aquí expuesta.

Lo de la muerte de la nuera, fue un detalle que complementó una "medium" cuando acudió a la hacienda, y es que esa es otroa historia. Un día en un trabajo de rastreos común, ví una silueta en un cuarto de una mujer delgada y alta, fue claro y en un momento de estar concentrado en los radargramas.

A la postre llevaron a la medium y ella nos "confirmó" que esa mujer que ví era la nuera del hacendado que fue asesinadas por esa familia por haber sido infiel a su hijo. Aunque no me consta si sea cierto y no haya evidencia que haya un esqueleto sepultado clandestinamente, fue un detalle que complementó esta historia.

En fin, cosas que uno encuentra en sus investigaciones.

Saludos y gracias por sus comentarios a todos.

GeoTec Prospectiva.